En el norte de Europa, concretamente en la vibrante ciudad de Copenhague, se ha inaugurado un apartamento nórdico de 30 metros cuadrados dirigido especialmente a estudiantes. A pesar de su pequeño tamaño, el hogar ha sido diseñado para maximizar el uso del espacio, ofreciendo comodidad y funcionalidad sin sacrificar el estilo.
El apartamento, ubicado en un edificio de reciente construcción, ha levantado olas en el mundo del diseño de interiores y la arquitectura por su ingeniosa utilización del espacio limitado. Ha sido desarrollado por un grupo de arquitectos emergentes cuyo objetivo era proporcionar soluciones habitacionales asequibles y estéticamente agradables para estudiantes.
La distribución del inmueble es un claro reflejo del diseño nórdico tradicional: líneas limpias, una paleta de colores neutros y el uso eficiente de la luz natural. La entrada conduce directamente a una sala central multifuncional que combina el salón, la cocina y el comedor en un solo espacio abierto. Los muebles modulares juegan un papel crucial y permiten transformaciones rápidas para diferentes necesidades diarias. Por ejemplo, una mesa plegable puede funcionar tanto como escritorio de estudio durante el día, como mesa de comedor por la noche. El dormitorio, separado del área principal por una delgada pared de vidrio esmerilado con una cortina para mayor privacidad, alberga una cama elevada con espacio de almacenamiento debajo. Este espacio también se aprovecha con estanterí...