Emana un encanto de civilización único, según el Comité de gestión del distrito administrativo arqueológico de Liangzhu en Hangzhou.
El 6 de julio comenzó en China el pequeño calor en los veinticuatro términos solares, dando paso a la llegada de un calor abrasador. Para Hangzhou, capital de la provincia de Zhejiang, en el este de China, ese día también marca el inicio de una serie de actividades para conmemorar el quinto ‘Día de Hangzhou Liangzhu’ y el quinto aniversario de la inclusión del yacimiento arqueológico de Liangzhu en la lista del Patrimonio Mundial.
Organizadas por el Comité de gestión del distrito administrativo arqueológico de Liangzhu en Hangzhou, dichas actividades, que incluyen diálogos interculturales y exposiciones, están destinadas a mostrar la cultura de Liangzhu y darla a conocer al mundo, erigiéndola en patrimonio cultural de relevancia mundial. Liangzhu significa ‘hermosa tierra en el agua’. La antigua ciudad de Liangzhu constituyó un estado con civilización urbana temprana durante el periodo Neolítico en la región del bajo río Yangtsé.
En su extenso yacimiento arqueológico, un gran número de restos como canales fluviales, arroz carbonizado, objetos de jade y enterramientos han aportado evidencias de un complejo sistema de gestión del agua, una producción de arroz desarrollada, creencias culturales unificadas y clases sociales diferenciadas.
Dichos hallazgos permiten descubrir la civilización mat...