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Las creencias representan la aceptación de una cosa o un de hecho sin que exista una prueba para respaldarlo.
Tras cinco años estudiando los hábitos de un total de 361 personas -233 ricas y 128 pobres- Thomas C. Corley ha descubierto que sus creencias son capaces de dictar las circunstancias que los han llevado a estar en el lugar donde están ahora.
Aquellos que son ricos tienen creencias completamente diferentes a aquellos que son pobres o que pertenecen a la clase media.
Nuestros padres, nuestra familia, los profesores, la cultura y el ambiente donde nos desarrollamos (el barrio, el pueblo, la ciudad, el estado y el país) nos hacen adoptar algunos dogmas desde que somos niños. La mayoría de los que fueron criados en la pobreza han heredado creencias limitantes que les impiden avanzar en la vida. Aquellos que son capaces de salir de la pobreza y convertirse en ricos es porque han encontrado mentores que les han enseñado a creer en el éxito o emplear ciertas estrategias para eliminar las creencias limitantes.
Algunas de las creencias que adoptan los ricos y fomentan el éxito son:

Debo leer para aprender.

Yo soy responsable de lo que sucede con mi vida.

El dinero y la riqueza son buenos.

Cualquier persona tiene la capacidad de llegar a ser rico. Yo puedo llegar a ser rico.

Puedo resolver cualquier problema.

Puedo superar cualquier obstáculo.

Puedo crear mi propia suerte.

Las oportunidades están en todas partes.

Las oportunidades...